Justificación del estudio
El proyecto de investigación DECIA – Demanda y competencias informativas de académicos permite conocer las competencias
informacionales básicas que tienen los docentes y el tipo de demanda de fuentes contratadas por la universidad y las de
uso libre disponibles a través de Internet. Igualmente, el estudio permite asumir qué papel juega el maestro como promotor
del uso de la información en el aula a través de la solicitud de ensayos, los cuales tienen, como se señaló, la
característica de englobar todas las competencias que el MEIF, en el caso de la Veracruzana, señala como básicas para el
egresado de la institución. Para lograr las competencias informativas que requieren los aprendedores de modelos educativos
de tipo conductual-cognoscitivo es necesario utilizar estrategias que permitan desarrollar habilidades, ya discutidas,
para la identificación, localización, recuperación, análisis, asimilación y uso de la información; para la construcción,
generación y comunicación de los propios conceptos basados en tales elementos informativos. En esquemas constructivistas,
los procesos se basan idealmente en la construcción de conocimientos por parte de el alumno, desarrollando habilidades para
el aprendizaje de toda la vida, una habilidad que requieren los profesionistas para adaptarse al vertiginoso cambio científico
y tecnológico, así como a la transformación constante de tipo económico, político y social de la sociedad actual. La
información como medio transportador del conocimiento juega un papel vital en el auto-aprendizaje, por lo tanto las
habilidades informativas son necesarias para que el aprendedor, estudiante o alumno, según el rol que juegue en el proceso
educativo, las desarrolle durante su estancia en las instituciones educativas.
Las estrategias de aprendizaje DHI a nivel universitario deben estar enfocadas a lograr que el aprendedor desarrolle
capacidad para identificar su necesidad informativa, distinguir tipos y formatos informativos, seleccionar y evaluar
los mismos, así como capacidad para usar y construir nuevos conceptos basados en la información, aplicando el estilo y
los valores que de su disciplina. El fomento del desarrollo de dichas habilidades es una función que corresponde desempeñar
los expertos de la información: los bibliotecarios, pero la tarea final DHI es una función que deben asumir los académicos,
para formar un profesional competente que pueda asumir un rol de liderazgo cognitivo en la nueva sociedad del conocimiento,
que priva en las regiones más desarrolladas socio-económicamente del planeta.